La baja presión — el enemigo silencioso que destruye tus llantas y tu presupuesto
La baja presión es la causa número uno de fallas en llantas de camión. Descubre cómo afecta al casco, eleva tus costos por kilómetro y reduce la renovabilidad de tu flota.
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12/11/20252 min read
No es el camino… es la presión
En casi todas las flotas, cuando una llanta revienta, todos culpan al camino:
“Había un bache,” “agarró un objeto,” “la llanta venía mala.”
Pero la realidad es otra.
La baja presión es responsable de más del 90% de los daños que arruinan un casco, reducen la vida útil de la llanta y disparan los costos por kilómetro. Es un problema silencioso… hasta que truena.
La presión correcta: el secreto del rendimiento real.
¿Qué hace realmente la baja presión dentro de una llanta?
Cuando una llanta rueda por debajo de su PSI recomendado:
Genera calor excesivo
El flanco se flexiona más de lo que fue diseñado.
Ese movimiento adicional cose los compuestos internos —literalmente los quema desde adentro— debilitando la carcasa.
Un casco sobrecalentado rara vez sirve para renovar.Deforma la huella de contacto
La llanta ya no apoya parejo:
desgaste irregular,
mayor resistencia al rodaje,
aumento de consumo de diésel,
pérdida de estabilidad.
Acelera fallas internas invisibles
Cortes internos, separación de cinturones, microfracturas.
Desde fuera parecen “ponchaduras”… pero son fallas por calor.Reduce la renovabilidad del casco
Un casco que trabajó bajo presión incorrecta termina rechazado en inspección técnica.
Perdiste la llanta y perdiste la oportunidad de renovarla.
“Pero mis operadores sí revisan las llantas…”
La realidad en campo dice otra cosa:
Las revisiones manuales no detectan pérdidas lentas.
Un 20% de las llantas en carretera ruedan al menos 15 PSI abajo.
Los operadores suelen comprobar solo visualmente… y a simple vista una llanta puede estar 20 PSI abajo sin verse desinflada.
La baja presión no avisa. No hace ruido. Solo destruye.
La baja presión es el asesino #1 del casco
No es un mito.
No es teoría.
Es física, es calor, es costo.
Presión correcta = más vida + mejor rendimiento + cascos renovables + menos gasto por km.
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¿Cómo eliminar este enemigo silencioso en tu flota?
Implementa chequeos diarios con medidor, no con la vista
El 90% de los problemas se previenen asegurando presión correcta cada mañana.
Coloca sensores TPMS o revisiones semanales programadas
El TPMS no es un lujo. Es más barato que un reventón y mucho más barato que perder cascos renovables.
Asegura que el aire esté en rango para la carga real
PSI correcto depende de peso y aplicación.
Muchos camiones ruedan con presión de “libro,” pero no para la carga específica.Quita la llanta antes de que llegue a la tragedia
Si el flanco luce arrugado, caliente o desgastado irregularmente, sáquela.
Un casco salvado hoy es una llanta renovada mañana.
